El Centro Reina Sofía de Fad Juventud presenta el estudio “Medioambiente y desinformación. Percepciones juveniles sobre la energía y la sostenibilidad”, gracias a la colaboración de la Fundación Naturgy.
La investigación proporciona un análisis detallado sobre el conocimiento y la desinformación en torno al medioambiente que tiene la población joven en España, a partir de una encuesta online y de una monitorización en redes sociales. En la encuesta han participado 1.200 jóvenes de 16 a 29 años y la monitorización ha consistido en una escucha social para conocer los principales bulos medioambientales y otros aspectos de la desinformación sobre el medioambiente en redes sociales digitales.
El 45% de la juventud en España dice haber estado expuesta en el último año a bulos sobre sostenibilidad y cambio climático. A pesar de ello, solo el 19% se siente realmente capaz de identificarlos con mucha seguridad, lo que evidencia una vulnerabilidad generalizada ante la desinformación.
Los bulos medioambientales adoptan formas diversas, desde falsas alertas sobre la peligrosidad de los coches eléctricos hasta teorías sobre las “ciudades de 15 minutos” o las teorías conspirativas sobre los “chemtrails”, entre otras muchas. Estas narrativas, aunque infundadas, se extienden con facilidad y contribuyen a sembrar dudas sobre políticas y avances en materia climática. De hecho, el 40% de la juventud cree que los bulos sobre sostenibilidad son más frecuentes que los de otros ámbitos.
La juventud no es ajena a este fenómeno y, aunque el 51% afirma que intenta verificar la veracidad de las informaciones cuando duda de su credibilidad, la sobrecarga de datos y la rapidez con la que circulan los bulos dificultan la capacidad de discernir qué es real y qué no.
Las redes sociales se han consolidado como el canal principal de información medioambiental para la juventud: el 53% recurre a ellas para conocer noticias sobre sostenibilidad, seguidas de la televisión (51%).
Pero este protagonismo también las convierte en el principal canal de desinformación. Más de la mitad de la juventud (54%) considera que las redes sociales son el espacio donde más bulos circulan sobre sostenibilidad. Este escenario plantea un desafío adicional: la juventud no solo debe informarse, sino también desarrollar habilidades para filtrar y contrastar el contenido al que se accede.
Sin embargo, no toda la juventud es igual de vulnerable a la desinformación. Factores como la edad, el género o el nivel educativo influyen en la capacidad para identificar información falsa.
